Como dice ABBA, thank you for the music. Una sonda de energía que te llena el alma y alimenta el corazón; te hace vivir eternamente aunque sean sólo segundos. Pero más que a la vida por permitirla, se la debo a mi madre. Por permitirme la experiencia de sentirla profundamente. Recuerdos de noches que la perturbaban y su tranquilidad era acurrucarme junto a ella en el sofá, mientras estás ondas armoniosas se paseaban por nuestros oídos. Por esos simples y otros momentos que me has brindado, madre, gracias por la música.
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